El Gran Maestro de la Gran Logia de Chile, Juan José Oyarzún, rindió un homenaje a las Damas de la Fraternidad, al entregar un saludo con motivo del trigésimo segundo aniversario de la institución de abnegadas voluntarias. El acto tuvo lugar en el Auditorium del Edificio Citerior de calle Marcoleta Nº 665.
La alta autoridad dijo que “en el mundo de las ideas, la Caridad en la filosofía cristiana se aprecia como el lazo que une al hombre con Dios, e inclusive los partidarios del principio de caridad la consideran como el ideal ético de la ‘reducción de la violencia en todas sus formas’, considerándola el supremo valor que emana de la historia del ser”. Agregó que “creemos consistente extendernos en unas pocas palabras adicionales sobre el amor al prójimo y la humanidad, que algunos definen como filantropía y otros como humanitarismo, y que el docto Cicerón, filósofo y tribuno de la Roma del siglo inmediatamente anterior a nuestra era, define en breves palabras: “Es natural la recíproca solidaridad de los hombres entre sí, por lo cual necesariamente un hombre no puede resultar un extraño para otro hombre, por el hecho mismo de ser hombre”.
Las Damas de la Fraternidad, recordó Juan José Oyarzún, “ejercen todas esas facetas de la Caridad ya que están compenetradas del afán de servir con máxima conciencia, abnegación, sacrificio, tolerancia y desinterés en su cometido, acatando disciplinadamente los deberes y obligaciones que le impone su condición de Voluntaria”. Precisó a continuación que “no están adscritas a Logia alguna, tampoco practican ceremoniales con afán de estudio para su perfeccionamiento, y en su acción externa no hay otra aspiración ni intención que el valor de servir al prójimo por amor a la humanidad”.
“En nombre del Gobierno Simbólico de la Gran Logia de Chile rendimos un homenaje a su labor abnegada y silente, y nos enorgullecemos de los vínculos que nos unen por el bien general de la humanidad”, manifestó. Finalmente, el Gran Maestro de la Gran Logia de Chile les deseó un feliz cumpleaños y les dijo que “la gratitud de los afortunados que a diario ustedes socorren, vigorice vuestros corazones, este día y todos los días del año. Muchas gracias por la labor realizada”.
CEREMONIA
Las Damas de la Fraternidad celebraron sus 32 años de existencia en una solemne ceremonia que presidió Juan José Oyarzún, y donde se entregaron distinciones a las voluntarias que cumplieron años de desinteresado trabajo a favor de la comunidad. El acto tuvo lugar el viernes 25 de septiembre en el Auditorium del Edificio Citerior de calle Marcoleta Nº 665 y la fecha fue resaltada por la presidenta de la organización, Marta Areyte Soto, señalando la abnegación, entrega y amor con que cada integrante lleva adelante su misión.
La inquietud y deseo de ayudar motivaron a que un grupo de mujeres se organizaran y, con fecha 26 de septiembre de 1977, dieran origen a la entidad en el Hospital El Pino de San Bernardo, extendiéndose luego su quehacer a otros centros asistenciales. El espíritu de las Damas de la Fraternidad es atender al enfermo hospitalizado de escasos recursos, entregando ayuda material y apoyo espiritual, estableciendo un vínculo de información entre el paciente y su familia. En la actualidad, cuenta con una activa presencia en el Hospital El Pino de San Bernardo, Hospital San José de la comuna de Independencia, Hospital Instituto Psiquiátrico “Doctor José Horwitz Barak” de la comuna de Recoleta, y en el Instituto de Rehabilitación “Pedro Aguirre Cerda” de la comuna de Peñalolén.
Funte: Gran Logia de Chile