Londres, Reino Unido. Han pasado más de dos años después del escándalo en la cual la masonería francesa fue implicada y que ha dado la vuelta al mundo. Ha pasado medio año desde que la UGLE anunció la suspensión de las relaciones con la GLNF y casi una cuarta parte de un año desde cuando Inglaterra decidió romper las relaciones con la Gran Logia Nacional Francesa, pero no definitivamente.
La aparición de las declaraciones de Basilea y Bruselas indicó que las cinco Grandes Logias de Europa, encabezadas por las Grandes Logias Unidas de Alemania, están decididas a ayudar a cambiar el paisaje de la masonería francesa. Sin embargo, la declaración del nuevo Gran Canciller de la Gran Logia Unida de Inglaterra ha subrrayado en el mes de septiembre que espera que la GLNF recupere el reconocimiento de Inglaterra. Además, el Gran Canciller Derek Dinsmore, dijo que ahora no se puede levantar la cuestión de otorgar un nuevo reconocimiento a una otra Gran Logia en Francia.
Este mes, de acuerdo a la agenda oficial establecida por las Grandes Logias de Alemania, Bélgica, Suiza, Luxemburgo y Austria se emitirá un informe sobre el estado de la masonería francesa y la evolución de las negociaciones que tuvieron lugar. En el mismo sentido, en exactamente una semana se llevará a cabo la Asamblea Geenral Trimestrial de la Gran Logia Unida de Inglaterra, la última de este año, donde es posible que se vaya debatir sobre las decisiones del nuevo liderazgo de la GLNF y tomar nota del informa de las cinco Grandes Logias europeas.
La elección de un nuevo Gran Maestre y la decisión de ayer de Servel, el Gran Maestre de GLNF, de suspender a Stifani parece ser un primer paso en la armonizacion de la política de GLNF con las declaraciones desde hace casi tres meses del Gran Canciller de la UGLE .